Publicidad
7
Positivo
Negativo

Llegué a Lunacid por casualidad, por un comentario que ví en Twitter (no me acostumbro a llamarlo X) de Locomalito. Un comentario simple, que decía que tenía un juego al que quería dedicarle tiempo. Lo vi en Steam y como estaba barato, decidí probar… Esta es la historia de lo que encontré.

Los comentarios previos rezan que el título bebe de los primeros juegos de FromSoftware. No se si es bueno o malo, no los jugué nunca. Pero, tras unas horas jugando a Lunacid, me inclino a pensar que es cierto pues comparte algunos de los patrones que más tarde explotarían en los famosos juegos Demon y Dark souls. Pero, no nos adelantemos, no se puede juzgar por sensaciones. Así que he dedicado un buen tiempo a jugar y tratar de entender el juego.

Bebiendo de lo clásico

No habré jugado a los clásicos de FromSoftware, pero llevo jugando a videojuegos mucho, mucho tiempo y, aunque no les suene a muchos de los que lean estas líneas, hay otros juegos que me vinieron a la mente nada más ver los primeros compases de Lunacid: los Ultima Underworld (I y II). Si mi memoria no falla, estos fueron los primeros juegos que implementaron un mundo 3D puro (no, los clásicos de ID Software Wolfstein y Doom no son 3D reales). En su momento recuerdo que estuve frustrado varios meses porque mi triste 286 no daba la talla y no podía ejecutar el primero de los Ultima. Me tuve que esperar hasta poder actualizar a un procesador 386 para poder jugar a esta joya.

Anuncios
Pantalla del Ultima Underworld
Pantalla del Ultima Underworld

Más allá del avance técnico que supuso para la época, me quedo con la ambientación y la ambición de estos títulos, que trataban de llevar todo el mundo de la saga Ultima (una de las primeras sagas RPG puras) a un entorno 3D en primera persona.

Pero basta de hablar del pasado, esto era únicamente para señalar que, si bien Lunacid parece ser una especie de tributo a los juegos primigenios de FromSoftware, sus raíces son más profundas.

Técnicamente…

No se puede juzgar Lunacid por su apartado técnico, pero sin duda es lo primero que salta a la vista. No es tan retro como los juegos de Ultima que mencionaba antes (estos son anteriores, de finales de los 90), pero si creo que se a nadie acostumbrado a las texturas HD de hoy en día le pasará desapercibido el estilo de texturas SD que tiene el juego. Entiendo que se pretende recrear el diseño de los juegos de principios de los 2000, cuando se empezaba a popularizar el 3D en primera persona, pero no hay que negar que de primeras echa para atrás, como que causa algo de rechazo. Tienes que amar mucho este estilo de juegos para que te apetezca pasar más de 15min en este entorno «viejuno».

Anuncios

Tampoco es que las mecánicas de movimiento, salto, ataque y demás sean la bomba. Más bien simplonas, incluso toscas Sobre todo choca e incluso molesta el cómo tenemos que enfrentarnos a los enemigos, con una forma de combate (?) que resulta de lo más arcaica. No se si esto es una limitación del equipo de desarrollo o es buscado a propósito, espero que lo segundo.

Pero, como se suele decir, no hay que juzgar el libro por la portada, así que decido seguir un rato. Y el rato se convirtió en unas horas, y las horas en más horas… ¡He quedado atrapado por este extraño mundo!

¿Dónde está el truco?

Pues realmente no hay truco más que, nuevamente, las bases de lo que tiene que ser un juego. Si nos olvidamos de todo el apartado técnico, el juego ofrece una aventura de mazmorras en su estado más puro. Tenemos que explorar zonas (sin ayuda de ningún mapa, salvo que nos lo hagamos en papel), hablar con NPCs que nos encontraremos por el camino, averiguar cómo abrir puertas cerradas, luchar contra enemigos, encontrar armas, equipar anillos,… Todo lo que define un RPG clásico lo encuentras en Lunacid, pero con el aliciente de que todo lo tienes que ir descubriendo tú, el juego va dando pistas, pero no te ayuda en nada, como ocurría antes. Claro que hoy en día tenemos a «San Google» para que nos ayude, pero esto ya es decisión de uno mismo. Lo cierto es que la magia de Lunacid está justamente en esto, en volver a los orígenes de los RPG en los que los jugadores tenían que jugar y jugar y dar mil vueltas para resolver los puzles que el juego planteaba. Y, a poco que seas un poco curioso o inquieto, esto es un imán de lo más potente, sobre todo si, como es el caso, el juego se ha hecho con cariño y respeto a unos días en los que el jugador estaba más solo, pero también disfrutaba mucho más de la experiencia que el juego ofrecía.

Anuncios

No, no es un juego al alcance de muchos. Hay que querer sufrir, hay que querer explorar, recorrerse los niveles cientos de veces, buscar secretos, probar cosas, anotar en papel (¿en papel? ¿a estas alturas?). Además, olvídate del auto guardado. No, aquí no hay esos lujos… El guardado es manual y en puntos concretos del juego, no cuando tú quieras. Los viales de vida y maná son escasos (quizás demasiado), los enemigos son duros y, con el tosco sistema de combate que comentaba al principio, desespera y casi siempre te arañan algo de vida, pero tú tienes que seguir avanzando con cuidado, para llegar al siguiente punto de guardado. Si, como en los souls, solo que todo más tosco y en primera persona.

Te lo he querido poner difícil para que no te lleves luego a engaños, pero de verdad que si el juego consigue engancharte, la recompensa es una satisfacción que no te da casi ningún juego actual.

¿Qué? ¿Te atreves con el reto?

Mantente al día de todos nuestros artículos... ¡es gratis!

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

Picture of Alberto Sánchez

Alberto Sánchez

¡Me encantan los videojuegos! Es mi pasión desde que un día mi padre trajo a casa un flamante ZX Spectrum. Desde entonces, no recuerdo haber parado de divertirme, frustrarme, emocionarme y por supuesto, maravillarme con todo lo que este mundo es capaz de ofrecer.