De vez en cuando ya sabes que Steam tiene la costumbre de aglutinar un montón de demos de juegos que están por llegar en lo que ha denominado Steam NEXT FEST. La verdad es que es muy buena oportunidad para probar muchas de las cosas que has visto en alguna revista y que parecen prometedoras. Incluso, para darte el gusto de probar algo totalmente random pero que, a priori, tiene buena pinta.
El problema es que, cada vez más, este evento está plagado de cosas, algunas buenas, otras normales y muchas mediores. Y para perder el tiempo no estamos.
Aquí te dejo las que he podido probar. Si llegas a tiempo estaría bien que las pruebes. Si no, al menos quedan como referencia para cuando salgan a la venta.
Mandragora
Sobre este juego ya escribí unas impresiones hace poco, pero como vueve a estar en cabecera del evento, lo dejo por si alguien no lo ha probado aun.
Somber Echoes
Lo tenía en seguimiento desde que ví noticias hace un tiempo y no he desaprovechado la oportunidad de probarlo. Por situarnos, es un metroidvania, pero algo atípico. Los primeros compases del juego te dejan frío, con unos entornos en 2.5D que se nota que tienen un trabajo de artísitico muy alto por detrás pero que no lucen en absoluto debido principalmente a la atmosfera oscura que rodea todo. Como es normal, no tardamos en hacernos con nuestro arma con el que ya podemos despachar enemigos. Paradójicamente, el primer poder que obtenemos es una especie de desplazamiento dirigido que abre un monton de posibilidades al juego en el ámbito del plataformeo.
A partir de aquí la demo deja deambular por bastantes minutos por escenarios de distinta estética, algunos que asombran por su diseño y otros más normaluchos. Tampoco aporta nada nuevo a las mecánicas que ya conocemos además del poder de desplazamiento dirijido. Pero no quita que la sensación general sea de que el juego tiene buenas ideas, buena realización y un acabado de alto nivel que invita al menos a ponerlo en la lista de deseados.
The Stone of Madness
El nuevo juego del estudio sevillano creador de la saga Blasphemous ha resultado una auténtica sorpresa. Aun no tengo claro si la propuesta me encaja, pero es una apuesta muy arriesgada y un cambio total de planteamiento respecto a lo que el estudio había hecho hasta el momento.
Por que te hagas una idea, lo primero que me vino a la cabeza tanto por estética como por historia es que estaban tratando de hacer un juego que trajera de vuelta la joya de la edad de oro del videojuego español: La abadía del crimen. Pero al comenzar a jugarlo las mecánicas también me recordaban mucho a otro clásico del software patrio: la saga Commandos. No se si así te queda algo más claro lo que puedes esperar. Si no, te resumo muy rápidamente. Puedes controlar a distintos personajes en tu grupo con distintas habilidades. Con ellos deberás ir resolviendo puzles que te permitirán avanzar en la investigación que se propone (la historia) mientras tratas de que los guardias y los distintos enemigos no te atrapen. Para ello, deberás utilizar tanto el entorno como los distintos objetos que vas a ir recogiendo en las distintas habitaciones.
Como decía, la propuesta de The Game Kitchen es muy diferente de lo que habían hecho antes y seguramente no encaje a muchos de los que disfrutaron con los dos Blasphemous. A mi personalmente me ha encantado el planteamiento y la atmosfera que deja entrever la demo. Aunque no soy un gran fan de los juegos de estrategia y sigilo, creo que a este si le daré una oportunidad.
RESETNA
Este es el típico juego que pinta bien pero en cuanto lo instalas te das cuenta de que es de serie B (o C, o D, …). No se si será por el estado del desarrollo en que se encuentra, pero en cuanto lo empiezas a jugar se le nota tosco, con mala respuesta a lo que quieres que tu personaje haga, con unas animaciones poco pulidas, movimientos lentos y algo forzados. Todo esto son aspectos técnicos que pueden ser pulidos hasta el lanzamiento. Pero se muestra poco original, con los mismo que hacen otros 100 juegos en cuanto a armas, dash, parries, etc. Y la historia igual de plana, sin ningún tipo de incentivo para seguir dedicando tiempo a jugar. En resumen, olvidable.
ANTONBLAST
Un juego de plataformas con un punto de locura que lo hace algo inclasificable. En cierta medida me recuerda a los primeros Sonic en el sentido de que pasan las cosas tan rápido que no eres del todo consciente de lo que está ocurriendo en pantalla. Pero Antonblast lleva esto a cotas muy superiores, haciendo que la velocidad en el transcurso de la acción nos haga a veces meros espectadores que no entiende muy bien lo que ocurre.
El juego tiene una estética retro, con gráficos muy pixelados. Pero es lo de menos. La brutal velocidad con lo que transcurre todo en pantalla es lo importante. Parece que tu único objetivo es destruir todo lo que encuentres a tu paso mientras vas avanzando pantalla tras pantalla y enfrentandote a ¿enemigos? cuyo único fin es intantar pillarte entre descanso y descanso de destrucción. Yo la verdad no le he encontrado mucho el sentido, pero habrá quien se lo encuentre.
